Campaña de DRAGON AGE en el club ARS LUDICA. Sesión 29 Las peligrosas trampas del túmulo tevinteriano

Hola, amig@s de albinusrol, hoy continuamos nuestra serie de entradas dedicadas a la Campaña del juego de rol DRAGON AGE, la cual he dirigido en el Club ARS LUDICA junto a mis compañeros Dani "Danpe", Fede "Scarver", Francisco "Telmo" y Alejandro. Me gustaría compartir con tod@s vosotr@s el resumen de cada sesión y mis técnicas e ideas que he utilizado para las partidas como director de juego.


Preparación y dirección de la sesión de Dragon Age el juego de rol

En primer lugar, sí queréis saber más de este juego, os recuerdo que nuestro compañero Fede "Scarver" nos dejó dos reseñas en el blog: Dragon Age. Caja básica. Manual del jugador y Dragon Age. Caja básica. Manual del director del juegoAdemás, en albinusrol hemos jugado la partida La Maldición dalishana en youtube.



Como bien sabéis, en la sesión 28, los héroes consiguieron taponar el pozo mágico para evitar que más muertos vivientes se arrastraran hacia ellos. Además, descubrieron un espejo ornamentado de gran poder que les hizo revivir momentos de felicidad cuando atravesaron su líquida superficie. Por último, en la estancia más grande de esa planta del túmulo, se enfrentaron a cuatro criaturas de la sombra que protegían los sarcófagos de los héroes guardianes del Comandante Aristan.

Desarrollo del Túmulo Tevinteriano de Aristan el Grande

En esta sesión, los héroes continúan explorando el resto de las estancias de la primera planta subterránea del túmulo de Aristan. Sí, recordáis, después de una dura batalla, terminaron heridos tras enfrentarse a las cuatro sombras guardianas y finalmente volvieron a la sala del espejo.

Con el objetivo de dar más emoción a lo que encontrarán más adelante, decidí que el espejo mágico volvería a estar activo, pero solo restauraría vida y maná a los que crucen su superficie con el lingote de oro. Por supuesto, seguirán sin saber que se trata de un Portal de Clonación: Si un personaje cruza el portal, será clonado de inmediato. Su clon aparecerá en una sala concreta del túmulo. Desde el momento de su aparición, su misión no será otra que la de encontrar a su alter ego y eliminarlo para sustituirlo. El clon estará ataviado con las mismas vestimentas y armado con armas análogas. Por lo tanto, habrá dos clones por personaje.


La sala de trofeos del Comandante Aristan estará llena de cabezas de animales salvajes disecadas y colgadas de las paredes. Unos pocos trofeos macabros compartirán el muro con estos animales. Entre ellos, se apreciarán las cabezas de dos Genlocks y un Hurok. En el centro habrá un pebetero que se encenderá cuando bajen los personajes y emitirá una luz azulada que arrojará sombras siniestras. En el fondo de la estancia, vitrinas con cristales rotos y mesitas de madera destruidas sugerirán un estado de abandono y caos. Las herramientas de taxidermia yacerán dispersas, recordando tiempos en los que esta sala fue testigo de la cuidadosa conservación de los trofeos del Comandante. Al Este habrá una puerta de bronce similar al resto del túmulo.


En los descansillos de la zona 11 percibirán una antigua magia poderosa pero desconocida. Los personajes deben ir en fila india. El primero que cruce la primera sala verá un campo de fuerza rojiza que le impedirá avanzar o retroceder. Este campo tiene 50 puntos de golpe por si el héroe que iba detrás pretende romperlo. Solo un disipar magia con éxito contra CD 19 eliminaría los campos de fuerza. Cada descansillo tiene un guardián: En el primer caso, atacará una araña gigante que bajará desde el techo y en el segundo será un Necrófago que saldrá de una trampilla. Una vez finalizado un combate, se abrirá la zona y los héroes podrán distribuirse de otra manera para afrontar el siguiente enfrentamiento. El pasillo termina en un portón de bronce, que también se abrirá con el manojo de llaves tevineteriano.


En las próximas sesiones seguiremos desgranando este complejo funerario con el resto de las salas que componen la construcción y los peligros que acechan a nuestro grupo de valerosos héroes.

Resumen de la sesión de nuestra campaña de Dragón Age el juego de rol

En esta nueva sesión, los héroes regresaron a la sala del espejo mágico y atravesaron su extraña superficie. Después descendieron hasta la sala de trofeos del comandante Aristan, donde había incluso cabezas disecadas de engendros tenebrosos. Finalmente, tuvieron que atravesar un pasillo lleno de trampas para llegar a un portón de bronce donde les aguardaba una asombrosa sorpresa. A continuación os dejo el resumen de esta sesión 29:

El enfrentamiento con las sombras tenebrosas resultó más arduo de lo esperado, llevando a los héroes al límite de sus fuerzas. Decidieron curar sus heridas y descansar en la sala del espejo, la cual les transmitía sensaciones reconfortantes. Al abrir la puerta, recorrieron de nuevo el pasillo resplandeciente hasta la sala del monumental espejo de bronce ornamentado. La superficie sólida volvía a presentar una extraña sustancia líquida en lugar del cristal habitual.

Burul, que cojeaba debido a un profundo corte en la pierna derecha, fue el primero en cruzar la superficie ondulante, sosteniendo su enorme lingote de oro entre sus poderosos brazos. Se sumergió en una magnífica experiencia onírica donde revivió una etapa de conquista, fuerza y honor. Al regresar, estaba ileso, pero su preciado lingote había desaparecido.


Jarley, más cauteloso, decidió dejarle “su tesoro dorado” a Burul antes de ingresar al espejo. El mago experimentó premoniciones futuras y salió con sus heridas parcialmente curadas y una expresión preocupada. Telmo, renuente a desprenderse del oro, saltó al espejo sin él y vislumbró visiones inquietantes de los restos de Logerswold y el sufrimiento de su antigua amante Sigrid. Al salir estaba frustrado y su herida en el costado continuaba sangrando. Euphraty, decidida a seguir el ejemplo del mercenario qunari, saltó con el oro y experimentó una maravillosa visión donde el pueblo élfico alcanzaba su ansiada libertad, al salir, irradiaba felicidad y sus heridas habían desaparecido.


Los héroes abandonaron la sala del espejo y, sumidos en sus propios pensamientos, se dirigieron a la escalera sur. Descendieron con precaución unos cuarenta peldaños regulares y llegaron a una estancia iluminada por una luz azulada que emanaba de un pebetero central, arrojando sombras siniestras sobre las paredes adornadas con cabezas de animales disecadas. Los ojos sin vida de los trofeos miraban fijamente desde sus lugares en la pared, dando la impresión de estar vigilando la estancia.


Entre los trofeos macabros, destacaban las cabezas de dos Genlocks y un imponente Hurok. En el fondo de la sala, vitrinas con cristales rotos y mesitas de madera destrozadas sugerían un estado de abandono y caos. Las herramientas de taxidermia, ahora oxidadas, yacía dispersas por el suelo.

Telmo afirmó que se encontraban en la sala de trofeos del comandante Aristan, que además de matar engendros tenebrosos se dedicaba a la caza mayor. Una puerta de bronce al lado este de la estancia parecía ser la siguiente etapa del misterioso túmulo.

Burul, con su manojo de llaves, desbloqueó la puerta y se adentró en un estrecho pasillo que conducía hacia otro portón de bronce. Solo el mercenario se aventuró mientras recitaba versos melancólicos sobre su tierra natal, seguido por Jarley, quien con una palabra mágica creó una pequeña esfera de luz para iluminar la cerradura. Al abrir la segunda puerta, el qunari ingresó a un pequeño descansillo con dos pebeteros a los lados con una luz blanca mortecina. Cuando percibieron la presencia del mercenario, los pebeteros cambiaron su luz a un tono rojizo y desencadenaron una trampa. Un obstáculo mágico color carmesí impidió que Jarley avanzara hacia el descansillo, y otra barrera bloqueó a Burul frente a la siguiente puerta de bronce.


En el rellano, cuatro columnas de un metro de altura sostenían figuras en sus extremos. Tres de ellas se desmoronaron, mientras que la cuarta se iluminó tenuemente. De repente, una trampilla se abrió en el techo, revelando una araña gigante que atacó al mercenario con ferocidad.


Euphraty, con un grito iracundo, ordenó a Jarley que abandonara el pasillo, y el mago sobresaltado resbaló con su túnica y cayó de bruces contra el suelo de la sala de trofeos de caza. La elfa extrajo una flecha de su carcaj y, con un certero disparo, impactó en el campo de fuerza, debilitándolo. Telmo desenfundó su arco y se unió al ataque. Jarley, tras levantarse del suelo y sacudirse su polvorienta túnica, ayudó con su varita a debilitar la barrera que separaba al qunari del monstruo. Sin embargo, Burul no parecía tener problemas con la araña a la que había herido fácilmente con su enorme espada y controlaba sus acometidas gracias a su gruesa coraza.

Una vez derribado el campo de fuerza carmesí, la araña yacía inmóvil en el descansillo junto al mercenario. Luego, rompieron la siguiente barrera para permitir que Burul abriera la puerta con su manojo de llaves y se topara con otro descansillo sospechosamente similar al anterior.

En esta ocasión, Telmo tomó la iniciativa y entró sin dudar en el descansillo. Agarró con firmeza la pata de conejo que colgaba de la empuñadura de su hacha, confiando en su buena suerte. Nuevamente, se activaron dos barreras, y tres de las figuras en las columnas se desmoronaron, mientras que la cuarta se iluminó. Preparado para el ataque, Telmo alzó su hacha hacia la trampilla del techo, y cuando un putrefacto necrófago cayó sobre él, lo despedazó con un preciso movimiento.


El resto del equipo trabajó en conjunto para romper la barrera que bloqueaba el camino, y Telmo, con su hacha, despedazó el campo de fuerza siguiente. Sincronizados, los héroes se prepararon para enfrentar cualquier desafío cuando cruzaran la siguiente puerta.

Burul insertó la llave correcta en la cerradura del portón y, al abrir, se encontró con dos mercenarios qunari idénticos a él, quienes lo miraron furibundos. A un lado del descansillo, Telmo observó sorprendido parte de un dormitorio donde un mago, similar a Jarley, charlaba con una elfa dalishana, parecida a Euphraty...

¿Por qué Aristan el Grande se dedicaba a exhibir las cabezas de los engendros tenebrosos en su sala de trofeos?, ¿qué protegen las trampas instaladas en el pasillo?, ¿por qué el espejo mágico solo curó a los héroes que cruzaron su superficie con el lingote de oro? Estás y más preguntas deberán tener respuesta en futuras sesiones.

Espero que os guste nuestra campaña,

Un saludo a tod@s

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